Autoridades sanitarias en México han confirmado el primer caso de la subvariante JN.1, también conocida como Pirola, del virus SARS-CoV-2 en la Ciudad de México. El Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) y el Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen), de la Secretaría de Salud, reportaron la detección de esta subvariante tras la secuenciación de 150 muestras provenientes de la capital.
A pesar del reporte del primer caso de esta subvariante en el país, las autoridades de salud han señalado que, hasta el momento, no se ha evidenciado que la subvariante JN.1 represente un riesgo mayor para la salud pública. Según los informes proporcionados por las autoridades, se mantiene un monitoreo continuo sobre la actividad de COVID-19 y la propagación de las variantes circulantes, incluida la JN.1.
Un comunicado emitido por las autoridades sanitarias destacó que, según una evaluación reciente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el riesgo para la salud pública asociado con la subvariante BA.2.86, y sus linajes descendientes, entre ellos el JN.1, es considerado bajo en comparación con otras variantes en circulación.
Ante la confirmación de la presencia de esta subvariante, se han reiterado las medidas de prevención de enfermedades respiratorias. Entre estas se incluyen el lavado frecuente de manos, el uso adecuado del cubrebocas, la ventilación de espacios cerrados, el distanciamiento social y el evitar compartir utensilios para comer.
La Secretaría de Salud enfatiza la importancia de permanecer alerta ante cualquier síntoma respiratorio, y en caso de presentar síntomas de gravedad como dificultad para respirar, fiebre no controlada o cansancio extremo, se recomienda acudir a recibir atención médica de manera urgente.
Las autoridades han instado a la población a seguir estas medidas de prevención como parte de los esfuerzos para reducir la propagación del virus y proteger la salud pública.