Chicago, EE.UU., 11 de julio de 2025.– Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, se declaró culpable este jueves de narcotráfico, lavado de dinero y portación ilegal de armas, en una audiencia ante la jueza federal Sharon J. Coleman en una corte de distrito en Chicago, Illinois.
La declaración de culpabilidad evita la realización de un juicio y podría reducir significativamente su condena, la cual podría pasar de cadena perpetua a un mínimo de 10 años de prisión, dependiendo del cumplimiento de los acuerdos establecidos con el Departamento de Justicia estadounidense.
Posible testigo protegido
Con esta decisión, el líder de la facción conocida como “Los Chapitos” del Cártel de Sinaloa se abre la puerta para convertirse en testigo colaborador del gobierno de Estados Unidos, lo que podría incluir su ingreso a un programa de protección de testigos, cambio de identidad, e incluso, en algunos casos, la residencia o ciudadanía estadounidense.
Durante la audiencia, Guzmán López confesó sufrir depresión clínica y estar bajo tratamiento médico, aunque aseguró que su declaración fue completamente voluntaria y asesorada legalmente.
Un acuerdo millonario
Como parte del acuerdo judicial, “El Ratón” —como también es conocido— se comprometió a pagar 80 millones de dólares al gobierno estadounidense, el equivalente a unos 1,600 millones de pesos mexicanos, como reparación por sus actividades criminales.
La jueza Sharon Coleman fijó la sentencia para el 11 de enero de 2026, después del Día de Reyes, en una audiencia que definirá cuántos años pasará Ovidio en prisión federal.
Detención y extradición
Ovidio Guzmán fue capturado por fuerzas federales mexicanas en enero de 2023, en una operación que dejó decenas de muertos en Sinaloa. Ocho meses después, fue extraditado a Estados Unidos, donde enfrenta cargos relacionados con la introducción masiva de fentanilo y otras drogas sintéticas.
Medios internacionales han reportado que, como parte del pacto con Washington, Ovidio habría solicitado inmunidad para algunos de sus familiares a cambio de información clave sobre la estructura interna del Cártel de Sinaloa, actualmente dividido entre la facción de Iván Archivaldo Guzmán y la de Ismael “El Mayito Flaco” Zambada Sicairos.